Como conté anteriormente, tengo mi primera cita con la oncóloga que me habían asignado. La Doctora Nieves, me hace una serie de preguntas, como si en la familia hay antecedentes sobre la enfermedad, y le comento que apenas tengo información sobre mi familia paterna, y en la materna solo que mi abuelo fue operado hace muchos años del
intestino pero salió todo bien y vivió hasta los 92 años. Me comenta que mi enfermedad por mi edad seguro que era genética, tenía toda la pinta, me dice que la biopsia que me habían tomado había dado negativo y que no era posible ya que había metástasis en el hígado, que me tengo que repetir la prueba para volver a tomar otra biopsia y estudiar el tumor, seguramente tomaron muestra de alguna zona donde tenía mucho tiempo y por eso daba negativo. La primera en la frente otra vez tenía que estar sin comer, limpiar mi colon y sedarme.
Me comenta que podía ir al hospital General para hacerme un estudio genético, para futuros familiares, como mis hijos, si quiero hacérmelo, y le digo por su puesto mis hijos son lo primero para mí. Me explicó que me harían unas preguntas y me tomarían una muestra de sangre para futuros estudios.
Comienza a explicarme en qué iba a consistir mi tratamiento… Quimioterapia, Uf mi cabeza era una bomba de relojería, pero me relaja me comenta que en principio el tratamiento era para intentar reducir de tamaño el máximo posible la metástasis del hígado y poder operar que sería mi primera operación después de hacer 4 ciclos de quimioterapia, iban a ser cada 15 días, con previa analítica el día anterior para que todo estuviera bien antes del tratamiento.
Me explica como iba a ser mi quimioterapia que no todos los efectos secundarios que estaba leyendo no me iban a ocurrir. Habrían algunos como pinchazos en las yemas de los dedos, pinchazos en la garganta con las bebidas frías durante unos días, afectaría a mi sistema nervioso, tendría que controlarme la tensión día si día no, porque podría alterarse y subirme, vómitos aunque intentaría adaptarme el pimperan en los goteros del tratamiento en el hospital, podría peder fuerza en las manos, piernas, bueno había que empezar para saber como reaccionaría mi cuerpo ante la medicación ya que cada persona era capaz de soportar unos síntomas u otros…
Tenía que ponerme un reservorio, es un catéter interno.
Es un dispositivo metálico de pequeño tamaño que consta de una cámara
con superficie de silicona donde se pincha. Esta cámara está conectada
a un catéter (tubo de pequeño tamaño). El catéter va por debajo de la
piel hasta llegar a una vena de calibre grueso.
con superficie de silicona donde se pincha. Esta cámara está conectada
a un catéter (tubo de pequeño tamaño). El catéter va por debajo de la
piel hasta llegar a una vena de calibre grueso.
Tendía que entrar en la UCI para ponérmelo en el quirófano con anestesia local, y que me lo explicaría muy bien el doctor David, que sería quien se iba a encargar de colocármelo, si tenía alguna duda que él me las resolvería. Lo llama desde su consulta y me envía a tomar la cita con él para colocarlo lo antes posible.
Os podeis imaginar el miedo que llevaba en mi cuerpo. Era pánico.
Sigue explicandome como iba a ser todo que después de colocarme el reservorio estaría 2 días con un cabestrillo para no llevarme ningún golpe, y no moviera el brazo.
Y me vería ella en unos días para comenzar la quimioterapia, y después de las 4 quimios me enviaría al cirujano el doctor Guillermo que era su especialidad y era el mejor cirujano, cuando me recuperara de la operación seguiría con quimioterapia o me operarían del tumor del Colon, y seguiría con el tratamiento de quimioterapia que completo son 12.
Salí con tanta información a la vez que estaba bastante perdida, asustada, aterrorizada.
Bueno ahora entenderéis porqué empecé contando mi historia desde mi infancia y la relación con mi familia paterna.
Lo primero que me hacen es llamarme del hospital General para el estudio genético, y cuando entro a la consulta de la Doctora que me atiende, me hace unas preguntas, como que si sabía de algún familiar directo que tuviera cáncer de algún tipo y le digo que hacía poco tiempo me había enterado de una tía mía que había pasado por un cáncer de colon, pero que como no tenía ninguna relación con mi padre ni mis tíos pues era lo único.
La Doctora se pone a investigar en los archivos del hospital por mis apellidos, y me dice Ana Isabel, en tu familia hay varios casos por esta enfermedad y lo tuyo es genético ya que han habido 2 estudios ya en la familia pero no hemos dado con nada en común. Y estaban informados de que todos los familiares mayores de 30 años o con algún síntoma alarmante deberían tener un control por endoscopias y colonoscopias.
Imaginaros mi cara era un poema y no de los buenos. Nadie había pensado en nosotros. Que injusto, que duro fue ese trago.
Me hacen un informe en el que me indican que mis hijos tendrán que hacerse controles a partir de los 26 años.
De verdad que solo podía pensar en que sangre tan fría, tan poco corazón, sabiendo que había fallecido una prima mía joven de cáncer por lo que me dijeron por un tumor cerebral, dejando 2 niños pequeños, era hija del que le ayudo a mi padre a poner el bar a su nombre para quitarnos lo que era nuestro, el que me veía en los juzgados y no me dirigía la mirada, el que me veía por la calle con su mujer del brazo ir a misa, a la iglesia que había al lado donde vivía mi marido en aquel entonces, la iglesia de San Salvador, en el centro de Elche, y yo decirle a mi marido mira son mis tíos van a rezar pero no son capaces de decir hola a su sobrina y preguntarme como estás.
Mi madre se pone en contacto con mi tío Pepe el de Granada que era el único que tenemos relación y le cuenta mi caso, yo sé que mi tío se siente mal por no pensar en avisarnos, ya que hemos sido de los menores en la familia. Y con esto no quiero que se sienta culpable, hay muchos mas responsables de haberse puesto en contacto con alguno de nosotros para avisarnos, como mi padre, o cualquier otro familiar.
Bueno intento relajarme, ya que lo que me espera no es fácil, tienen que ponerme el reservorio y empezar todo cuanto antes y así fué, me lo pusieron un miércoles, creo recordar, le dijeron a mi marido que tardarían como mucho 1 hora en salir, pues no me puedo quejar de como lo llevo puesto ya que ni se vé a penas, pero no lo pasé nada bien.
Me entran en quirófano y empiezan a prepararme, viene un residente y comienza a señalar donde tenía que ir el reservorio, pero no era la zona indicada ya que sabía poner marcapasos pero era su primer reservorio y la zona es mas hacia arriba, suele sobre salir como un botón, a mí no se me nota, solo se vé solo una pequeña cicatriz. Pero mi experiencia en quirófano fue traumática, cuando empieza a pincharme la anestesia notaba temblar sus manos, yo estaba super tranquila e intento relajarme, las enfermeras en todo momento pendientes de mi, entra el cirujano y va explicándole como tenía que haber marcado la zona, lo que tenía que ir haciendo, y empiezo a notar dolor y me pregunta el cirujano Ana te hago daño? y le digo sí, me vuelven a pinchar anestesia uf que dolor como quema, pero bueno me dicen te tengo que mover la zona y no quiero que sientas dolor.
El residente, se pone nervioso y no consigue conectar el catéter en su sitio, y al final lo manda a la consulta a resolver un papeleo y sigue conmigo el cirujano que tenía la experiencia, y me dice lo siento Ana pero tienes mucha grasa donde te lo hemos colocado está muy cerca del pecho, pero acabamos ya.
Las enfermeras intentaban relajarme, me acariciaban porque estaba muy nerviosa ya al final de todo.
Me sacan y veo a mi tía y a mi marido tenían las caras descompuestas, y me llevan en silla de ruedas hacerme una radiografía para ver que no me hubiesen tocado la zona del pulmón, que me había explicado que podía pasarme, pero vamos al ponerlo tan bajito pues sin ningún problema, me dan el alta con el cabestrillo puesto, las indicaciones de las curas ya que llevaba varias grapas, me las curarían en mi centro de salud…
Habían pasado más de 2 horas en el quirófano. Podéis imaginar la desesperación que tenían por verme salir de allí, y yo de que terminaran….